CRECEN HOJAS EN EL LIBRO DE LA VIDA · 2024
CRECEN HOJAS EN EL LIBRO DE LA VIDA · 29-07-2024 · MAJOR
Me están enseñando un trébol de cuatro hojas y después me enseñan un libro en blanco. Y me enseñan como si lo abrieras y entre dos páginas estuviera ese trébol de cuatro hojas.
Y dicen: “Mucho se os ha hablado del destino. Y algunos creéis que por haber nacido en un lugar y en una época determinada estáis predestinados a vivir de cierta manera ciertos acontecimientos. Pero, os decimos, el contexto en el que habéis nacido sólo es un campo nutricio. Las semillas que plantáis en ese campo son vuestra responsabilidad. Las semillas que sembráis en vuestra vida responden a vuestra capacidad de escoger aquello que queréis que crezca y germine en vuestra vida. Es, en verdad, vuestra capacidad de crear. No hay recetas para la vida, ni hay señaladores que os indiquen qué hacer.
Os decimos, todo es posible. Y cuando empezáis a creer que todo es posible, la posibilidad se empieza a desplegar en vuestra vida. Nuevas hojas aparecen en el libro de vuestra vida. Si creéis que es posible que un trébol tenga cuatro hojas, esa cuarta hoja aparecerá y crecerá, y os regocijaréis al encontrarla y os admiraréis y os sorprenderéis, pero en el fondo de vosotros sabréis y entenderéis, e íntimamente reconoceréis que estáis creando vuestra realidad.
Un trébol de cuatro hojas en el libro en blanco de vuestra vida indica esa señalética, indica ese punto de libro que señala la posibilidad de crear y recrear vuestra vida. Aquellos que creen que las líneas y los renglones de la vida están escritos, están predestinados, aquellos que creen que no pueden escapar a su destino, están creando esa rueda de inercia, esa rueda de predestinación con su propia creencia. En verdad, todo aquello que creéis profundamente es aquello que creáis, es aquello que manifestáis.
Si creéis que es imposible encontrar tréboles de cuatro hojas, esa cuarta hoja no aparecerá. Y si creéis que está en vuestras manos hacer realidad cualquier posibilidad, el libro de vuestras vidas empezará a aumentar como un acordeón que se abre en el reconocimiento de su posibilidad. Las hojas en blanco empezarán a refulgir en el esplendor de lo que se crea cada día.
Cuando vivís en el presente continuo, cuando vivís en la pura presencia, cuando vivís en esa reconexión con vuestra esencia, con vuestra Fuente, con vuestro Origen, cada día, en verdad, es una página en blanco. Porque cuando os despertáis por la mañana, es un nuevo amanecer…”