LOS LAZOS DEL INFINITO · 2024

Así dice, “Cuando dos personas se aman en todas las dimensiones de su ser, se generan unos lazos de Amor que los vinculan al infinito. Para que dos personas puedan amarse en todas las dimensiones de su ser, en ese despliegue completo de su ser, primero tienen que haber sanado todos esos centros vitales, todas esas ruedas que llamáis chacras, que son las puertas a las dimensiones de vuestro ser.

Así, el que llamáis centro raíz es el que es la rueda que os permite fluir en esta vida. Al mismo tiempo que os sentís unidos a esta encarnación y que amáis esta oportunidad más allá de la adversidad, más allá de las circunstancias con las que habéis podido topar, decididamente, amáis esta oportunidad y os sentís bendecidos por estar aquí. Cuando este centro raíz fluye y gira con agradecimiento, sois grandes manifestadores.

Porque, fijaos, una semilla no puede florecer sin su raíz, una casa no se puede sostener sin sus fundamentos. Por eso, este centro es tan importante como todos los demás. A menudo, es el centro más vulnerable, pues es aquel que fue amenazado en vuestra infancia, es aquel que no fue respetado y fue perturbado. Incluso a veces podemos decir que fue violado en vuestra infancia, porque en vuestra infancia, este centro es un centro que depende de vuestro entorno.

En vuestra infancia, podemos decir que este centro está expuesto a las personas que tienen responsabilidad de ofreceros seguridad. Pero, en la madurez de vuestras vidas, en la que todos vuestros sentidos están desplegados y desarrollados, este centro vuelve a ser vuestra responsabilidad. Y es una buena noticia, porque eso quiere decir que este centro empieza a depender solo de vosotros mismos. Y ese conocimiento, ese saber, esa autosuficiencia es la clave de la sanación de este centro, pues la mayoría de vosotros habéis sido vulnerados en la infancia y, por tanto, la mayoría de vosotros necesita sanar este centro para poder vivir una vida plena, una vida enraizada, una vida próspera…”